Mucho en juego
en los primeros
controles médicos.
Los controles pre-natales son indispensables para asegurar que el embarazo se desarrolle de manera segura y poder disfrutar plenamente de esa etapa.
Es importante llevar un registro y cumplir al pie de la letra todas las fechas de vacunación, de esta manera el bebé queda protegido de por vida.
Los controles médicos antes del primer año nos aseguran que el bebé esté creciendo adecuadamente, y si aparece alguna enfermedad, es posible detectarla a tiempo.
Se debe llevar un control de crecimiento y desarrollo del niño o niña en los primeros años de vida, con el fin de detectar a tiempo cualquier problema.
Es importante seguir paso a paso los controles médicos prenatales porque aseguran el desarrollo adecuado del embarazo y vivir una experiencia armoniosa.
El bebé recién nacido debe asistir a todos sus controles, obtener sus vacunas y asegurar que esté creciendo adecuadamente y si existiese algún problema, detectarlo para tratar cualquier complicación a tiempo.
Es importante que la futura mamá reciba la vacuna de la influenza, si está en periodo de aplicación. Después de las 20 semanas, también la vacuna TDPA contra la difteria, el tétanos y la tos convulsa.
Se debe controlar periódicamente con el médico el nivel de hemoglobina, que indica si se tiene anemia. Si es un nivel grave de anemia se debe tratar inmediatamente.
Los controles prenatales son importantes porque la mamá se asegura de recibir los medicamentos necesarios y evitar utilizar fármacos sin consulta al médico, que puede ser peligroso.
Es importante tener en cuenta las visitas al dentista como parte de los controles pre-natales para asegurar la salud bucal de la mamá, que tendrá un contacto cercano con el bebé.
Los controles necesarios son 4, en los primeros 3 meses, a los 6 meses, 8 meses y 9 meses. Puede variar según las condiciones de cada mujer embarazada.
Los controles también pueden determinar si el embarazo es normal o presenta alto riesgo, por lo cual, el médico le hará las preguntas para conocer todos los síntomas en cada etapa.
Es recomendable que durante el embarazo la mamá pueda realizar ejercicios físicos suaves y moderados para evitar dolores e incentivar el desarrollo saludable en el embarazo.
Durante el embarazo es importante reducir todas las situaciones de estrés en lo posible, y no permanecer de pie por más de 6 horas al día. Los trabajos de más de 10 horas al día pueden presentar un riesgo alto de estrés.
El cuerpo del bebé se irá desarrollando a medida que vaya creciendo y ganando movilidad. Son importantes los controles médicos para asegurarse que todo vaya bien.
Algunos procesos pueden requerir de paciencia y dedicación, como las molestias que pueden aparecer con los primeros dientes y los cólicos que puedan padecer.
Es importante que en el ambiente laboral y el hogar no se manipulen agrotóxicos, agroquímicos, plomo, mercurio, etc. La inhalación de estas sustancias pueden resultar peligrosas en el embarazo.
Es indispensable asegurarse que antes de salir del hospital, el bebé haya obtenido la vacuna BCG (previene la tuberculosis), la vacuna contra la Hepatitis B y le hayan realizado el test del piecito.
El primer control del recién nacido debe hacerse luego de las 48 o 72 horas de nacimiento. El segundo control a los 10 días y el tercero a los 28 días.
Es importante que los médicos provean de información por escrito sobre cuáles son los signos de algunas enfermedades para tener en cuenta en los primeros meses.
Se considera que un peso normal es entre 3 y 4 kg y no debe estar por debajo de los 2,5 kg. Normalmente, aumentan de 600 a 900 grs por mes, los primeros 3 meses.
Normalmente se mide el contorno de la cabeza y su altura. Se considera que normalmente aumentan entre 5 y 8 cm por mes.
Los vómitos ocurren porque el tracto intestinal aún está desarrollándose, por eso es recomendable que se encuentre reclinado después de comer y evitar movimientos bruscos.
Los cólicos son dolencias comunes que sufren los bebés por no tener bien desarrollado el aparato digestivo. En estos casos, se deben seguir las indicaciones del médico.
El embarazo requiere que el ambiente donde la mamá vive y trabaja sea tranquilo y libre de violencia, que puede ser peligrosa durante el embarazo y tener un impacto para toda la vida del niño o la niña.
Un ambiente higiénico y limpio también es importante para el bebé, porque va desarrollando sus defensas poco a poco.
Es importante no abrigar en exceso al bebé porque puede provocar sofocamiento. Se puede comprobar la temperatura tocándolo, su piel no debe estar caliente ni muy fría.
Es responsabilidad de las personas alrededor que el ambiente durante el embarazo y toda la vida del niño o la niña esté libre de cualquier tipo de violencia física, psicológica y sexual.
Se deben evitar estufas y braseros encendidos en la habitación del bebé, y si se hace, debe tener suficiente ventilación.
Evitar la exposición al sol en los bebés en horas como la siesta. Su piel aún es muy sensible al calor y puede causarle quemaduras.
Los primeros dientes pueden causar molestias y dolor en los bebés. Les calmará morder algo duro y frío. Pueden ser útiles los mordillos enfriados.
El niño o niña debe dormir sobre un colchón firme y plano, boca arriba, para evitar el síndrome de muerte súbita.